La Historia de Auria y Ramón
Un Viaje de Resiliencia
2020: Un Nuevo Comienzo
El 28 de febrero de 2020, en la grúa de la rúa Roi Páez, de Ourense, aterriza una pareja de cigüeñas blancas sin anillar. Esta nueva llegada marca el inicio de su historia en la ciudad. Pronto comienzan a construir su nido y, de esta unión, nacen dos pollitos, bautizados como Cabanillas y Lola. Los habitantes de Ourense llaman a esta pareja Auria y Ramón. Este mismo año, la grúa, que estuvo parada durante 11 años, es retirada, lo que genera preocupación en la comunidad. Ante la situación, se presentan quejas a través de la prensa y escritos al Concello de Ourense y a la Xunta de Galicia, proponiendo soluciones alternativas para la protección de las cigüeñas.
2021: Conflictos y Desafíos
El 4 de enero de 2021, uno de los ejemplares de la pareja regresa y comienza a rondar Ourense en busca de un nuevo lugar para su nido, eligiendo la grúa del Museo Arqueológico como su nuevo «hogar». El 3 de febrero, en el día de San Blas, su pareja regresa y juntos inician la construcción del nido, enfrentándose a conflictos con la empresa que opera la grúa. Se producen tirones en la estructura, que generan estrés en las aves y resultan en el nacimiento de solo un pollito, Alas. Una intervención no autorizada de un operario que se acerca al nido para tomar fotografías pone en riesgo la incubación de cinco huevos durante dos horas. A pesar de las dificultades, Alas nace, pero su vida se complica cuando se enreda en cuerdas traídas por las cigüeñas para la construcción del nido. Ante la situación, se solicita una urgente intervención. Sin embargo, el operario, bajo instrucciones, interfiere, y Alas es bajado de la grúa en un mal estado, resultando muerto. Este incidente genera indignación y se denuncia la negligencia de la Xunta de Galicia. El 21 de junio se confirman las malas noticias: Alas ha fallecido.
2022: Esperanza y Renovación
El 18 de enero de 2022, la comunidad recibe una buena noticia: Ramón ha regresado. La alegría se siente en el aire, aunque la empresa responsable de la grúa ha retirado su nido. Ramón ocupa su puesto, esperando a Auria. El 17 de febrero, llega su pareja y juntos dan la bienvenida a dos nuevos pollitos, Verso y Suelto. Sin embargo, una vez más, enfrentan la amenaza de las cuerdas en el nido. Afortunadamente, gracias a la rápida intervención de agentes de la guardería y de COPASA, logran liberar al pollito menor del nido el 10 de junio, garantizando su seguridad.
El 27 de junio, se reporta que uno de los preadultos de cigüeña blanca (Ciconia ciconia) no logra levantar vuelo en la Praza Maior. Tras ser recogido y trasladado al CRF Alto do Rodicio en Ourense, recibe atención veterinaria y cuidados. El 10 de julio, ya recuperado, se libera a las 11:30 h, con la esperanza de que se reencuentre con su familia y regrese a su nido en las próximas horas. La comunidad se siente agradecida por el trabajo y la intervención de los Agentes Ambientales del Distrito (XII) y todos aquellos que cuidan de las cigüeñas y la fauna silvestre.
2023: Nuevas Generaciones
El 10 de enero de 2023, Auria y Ramón regresan a su hogar en la grúa y la comunidad celebra su llegada. Sin tener aún un nido, se expresa preocupación por la falta de sensibilidad de algunas empresas hacia la vida silvestre. Las aves se preparan para construir un nido aún más grande y resistente. El 9 de febrero, la nueva camada de cigüeñas, incluyendo a cigoñinos como Tan, Xu y Gueiras, llega a la vida urbana de nuestra ciudad. Son la cuarta generación descendiente de Auria y Ramón, proporcionando esperanza y continuidad en esta hermosa historia de resiliencia en el corazón de Ourense.
2024: Reuniones y Nuevos Comienzos
El 15 de enero de 2024, Auria regresa a casa, y la comunidad se emociona por su llegada a #Ourense para reunirse con su pareja. Inician juntos la quinta temporada, algo increíble. En la grúa del Museo Arqueológico de Ourense, se observan tres cigoñinos bajo el cuidado de uno de los adultos. Sus nombres tras soportar las lluvias de la difícil primavera Abril, Aguas y Mil. Destacando la prudencia y suerte de que la cría haya sido un éxito.
2025: Nuevas Esperanzas
El 4 de enero de 2025, llega un nuevo ejemplar que, por las noches, duerme en el nido y pasa largos periodos en los alrededores, aparentemente Ramón. Recibe la visita de otro ejemplar que se mueve hacia El Puente y El Polvorín. Finalmente, su pareja regresa al nido el 28 de enero, completando así un nuevo ciclo en la historia de Auria y Ramón.
Reflexiones Finales
La saga de Auria y Ramón es un testimonio de la fuerza de la naturaleza y la importancia de la convivencia entre los seres humanos y la fauna. A pesar de los desafíos, esta pareja de cigüeñas ha logrado superar adversidades y, con el apoyo de la comunidad, continúa su legado en Ourense.
Desafíos de las Aves en el Entorno Urbano
Las ciudades son entornos complejos que presentan una serie de desafíos para la fauna silvestre, incluyendo a las aves. A medida que las áreas urbanas crecen y se desarrollan, los hábitats naturales se ven reducidos, y las aves deben adaptarse a un paisaje lleno de obstáculos y peligros.
Uno de los principales retos que enfrentan las aves urbanas es la pérdida de hábitat. La construcción de edificios, carreteras y otras infraestructuras limita el espacio disponible para que estas aves aniden y se alimenten. Muchas especies, como las cigüeñas blancas, a menudo recurren a lugares inusuales para establecer sus nidos, como grúas y torres, que pueden parecer alternativas ideales, pero que también pueden implicar riesgos.
La contaminación es otro factor crítico. La presencia de plásticos, residuos y otros desechos en el entorno urbano puede afectar la salud de las aves. Estos materiales suelen ser utilizados por las aves para la construcción de sus nidos, lo que puede resultar en enredos y lesiones. En el caso de Auria y Ramón, la ingesta accidental de estos materiales ha tenido consecuencias trágicas, así como la interacción con humanos y maquinaria que pone en riesgo a sus polluelos.
El tráfico representa otro peligro significativo. Muchas aves pierden su vida al ser atropelladas, y el ruido constante y la actividad del tráfico pueden causar estrés, perturbando su comportamiento natural, sus hábitos de anidación y su capacidad para alimentarse adecuadamente.
Además, las enfermedades y los parásitos son más comunes en áreas donde las aves se agrupan. En las ciudades, la competencia por los recursos es intensa, lo que puede afectar la salud general de las poblaciones de aves.
Por último, la falta de conciencia y sensibilización por parte de la comunidad también obstaculiza la supervivencia de las aves urbanas. Iniciativas como las que apoyan a Auria y Ramón son esenciales no solo para su protección, sino también para crear un entorno favorable para otras especies.
A pesar de estos desafíos, las aves urbanas, como Auria y Ramón, demuestran una notable resiliencia y adaptabilidad. La colaboración entre la comunidad y las autoridades ambientales es fundamental para garantizar su protección y la riqueza de la biodiversidad urbana. Solo mediante esfuerzos conjuntos podremos crear un ambiente en el que tanto las aves como los seres humanos puedan coexistir armónicamente.
En la encantadora historia de Auria y Ramón, debemos recordar que tanto los nombres como las interpretaciones sobre su género son meramente especulaciones. Estas aves, que hemos llegado a conocer y apreciar, aún están sin anillar. Aunque este acto de humanización aporta un toque personal, es fundamental referirnos a ellos con humildad, reconociendo que carecemos de certeza científica. Todo lo que sabemos proviene de las dedicadas horas, meses y años de observación de expertos de la asociación, quienes nos brindan su valioso conocimiento sobre estas fascinantes criaturas.